Si ya compartimos cómo cuidar la piel en verano
Lo mejor será para no agredir más la piel (puede estar deteriorada por el salitre, el sol, la sequedad y demás agentes externos) tomar un baño con agua templada y un jabón neutro (sin perfumes ni sustancias irritantes). No refriegues demasiado luego para secarte, y utiliza una toalla suave.
Luego, conviene aplicar alguna buena crema que nutra, hidrate y refresque la piel. Hoy en día, se pueden encontrar buenos productos en el mercado, del tipo ‘after sun‘ que ayudarán a tener mejor la piel tras el sol y a hidratarla.
La alimentación también juega su rol en el cuidado de la piel y si de evitar el envejecimiento de la piel se trata. Escoge siempre buena cantidad de fruta fresca, verduras y cereales ricos en fibra y antioxidantes.
Tampoco olvides que así como la piel, el cabello también puede verse perjudicado, perder hidratación y brillo, y no sólo por el sol sino también por el agua de mar. Por ello, procura utilizar también champú o productos acondicionadores con filtro solar, además de sustancias que le devuelvan los nutrientes.
Finalmente, ten presente otra advertencia: no se recomienda exponerse al sol con el cabello húmedo o mojado, ya que el daño de los rayos solares es aún mayor a cuando está seco. Si no tienes otra opción, entonces en lo posible cúbrelo con un pañuelo o con un sombrero.
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